Loco afán-Cuerpo de estrella disco

A las dos de la mañana, con serpentinas hirviendo de sus poros,

brillo bombeando desde los tacones rojos a la rubia sintética,

carga: los desaparecidos pasan por todas las letras del abecedario.

Cuerpo de estrella disco.

Fragmentos tejidos por

las manos callosas de su madre

que talla

los trapos arrastrados.

Espejos rectangulares, inclinados, encajados,

oscurecidos, pintados, grises y blancos.

Cuerpo de estrella disco.

Marca de la pinta labial,

recogida de la bulla urbana,

sangrante de la juventud chilena.

Se escuchan las cacerolas y el chirrido del aceite

que se quema

al cocer el chorizo.

Cuerpo de estrella disco.

Joven con arrugas dibujadas a lápiz

baila hasta las cinco de la mañana,

se arrastra a escribir a las 7:00,

lamiendo sus golpes.

Viene de la violencia tanguera, putrefacta en la columna de Chile.

De la violencia que rompía la tanga tirada en la calle

de la violencia que escondía los vestidos y las plumas,

de la violencia que achicharraría los zurcidos del arte.

Aquella que arrastra los cuerpos, los refleja,

en las salivas ficcionales,

dejándolos morir por la enfermedad

y por los falsos hilos narrativos.

Cuerpo de estrella disco,

¿a dónde te llevan?

Mujeres que reflejan fuegos fugaces, colgadas.

Lemebel, ¿a dónde cuelgo la bandera?

Eltit, ¿a dónde cuelgo el saco de piel y huesos?

¿A dónde los llevan?

Cuerpo de estrella disco.

Baila a la música robada,

baila a las letras encajadas en la basura de la calle.

¡Baila!, cuerpo descosido.

Tantos puntos se rompen por la fuerza

y remienda

la queridísima madrecita.

Las locas aúllan, señor Pinochet,

y ni las bayonetas limpiarán sus botas

en nuestra memoria.

Mi nombre es Eileen Olivares Hernández, nací y crecí en México. Tengo 21 años de edad y estudio literatura latinoamericana. A finales de este año se publicarán mis cuentos Costuras en una antología de cuentos históricos de la editorial Letras Negras y Sin ojos, ni nariz ni boca en una antología de cuentos de terror de la editorial Komala.