Poemas de Germán Carrasco
Los poemas aquí publicados pertenecen a Metraje, reciente libro de poemas de Germán Carrasco, y sin ninguna duda, uno de los poetas más importantes de Hispanoamérica. Leo Metraje y siento el tiempo de las cosas y los sucesos transfigurados en varios actos cuyos movimientos hacen de cada poema el espectáculo consabido. El lenguaje articula imagen tras imagen un mito de la ciudad y del campo. Su lectura me lleva a saber, también, que estamos frente a breves documentales abiertos a un proceso de exploración. Hay claridad en estos poemas, y es desde su insignificancia donde una realidad se enciende. Quedan invitados a la lectura de estos hermosos poemas. W. G. M.
Lima, enero de 2019
Temed la muerte por agua
hay una boya en un mar bravo
y dos que se aman tratan de asirse
a la boya con desesperación
pero es resbaladiza de musgo y algas
es redonda y no tiene de dónde tomarla
es un muñeco porfiado siniestro
empieza a anochecer como en la montaña
en donde hay que llegar a la cumbre con sol
sin luz se pone todo más difícil
deciden flotar de espaldas
controlar la respiración
y miran las estrellas.
por qué no fuimos felices
–dicen– era tan fácil.
Ventolerías
Pisagua. Porvenir. Quebrada de Camiña.
Cómo te gusta venir en pleno invierno
a los lugares más Marte del territorio
en donde los milicos relegaban a la gente.
¿Quieres llenar cada espacio del mundo,
como en The Cantos? ¿Bendecirlos?
¿Filmarlos? ¿Darles tarjeta verde, visa de existencia?
“No quiero llenar el mundo con mi presencia,
me busco y te busco en esos lugares. En la intemperie
se escucha mejor el propio rezo, aunque no sé rezar
y creo que cuando uno cree hacerlo
en realidad una se habla a sí misma”.
No hay que ocupar cada palabra existente. Para qué
¿De dónde nace esa idea colonialista y atropelladora?
Voracidad. Samsara. Mejor
siente el viento. Te lo traduzco:
NO HAY QUE OCUPAR PALABRASSS
HAY QUE OCUPAR PALASSSSSSSSSS
HAY QUE OCUPAR LUGARESSSSSSS
como Pisagua o Porvenir.
Tomas. Conquistas. Equipos. Visitas.
El sol ilumina el lenguaje por dentro
El sol es un gato montés luminoso
que enciende los senderos a su paso
Ustedes se reúnen a trabajar y a comunicarse.
A meditar y a trabajar el cuerpo.
De la palabra al cuerpo.
De la palabra a la acción.
A terreno.
Cuerpo y terreno.
¿Quieres dejar en cada rincón la luz
de tu presencia?
¿Quieres iluminar los lugares sombríos con tu presencia?
¿Por eso incluso estás conmigo.
por el contraste brutal con mi grisura?
Aquí no manda dios sino el viento
y da la impresión que no hay nadie
en las casas. Por ahí un niño juega solo.
Hay un pequeño museo croata:
los instrumentos rústicos, rifles y botellas de whisky
de gente aperrada y loca que buscaba
migajas de oro en el fin de la galaxia.
Pisagua
Un hombre se fugó de la cárcel de Pisagua. Su intención no era escaparse, no hay cómo: mar por un lado, desierto por el otro. Se fugó para no darles el gusto de ser torturado y hablar, o presenciar torturas. Lo encontraron en el muelle, en cuyos pilares se posan hoy los cormoranes y le dieron un tiro. De alguna manera, fue su triunfo.
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En las orgías de Heliogábalo, había un caballo de bronce hueco en donde éste metía a un esclavo o esclava. Luego recalentaba con fuego el caballo para que los alaridos agónicos de la víctima fueran la música de fondo de la orgía y dieran la impresión de relinchos. Hubo uno de esos esclavos que no quiso ser la música de fondo, y se obligó a no emitir sonido alguno. Murió sin dar ese gusto a Heliogábalo. Similar al fugitivo de Pisagua, fue su triunfo.
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El pueblo está lleno de automóviles abandonados, de los años 70 y 80 deportivos, de colección. Se echaban a perder y como Iquique está lejos, hay cuestas y es difícil el transporte a Pisagua, salía más a cuenta dejarlos abandonados y comprar uno nuevo en Iquique, zona libre de impuestos. La aerodinámica en estos automóviles espera la carcoma del tiempo de la misma manera que en Porvenir –al otro extremo del país– se oxida un barco. Porvenir, donde van a buscar trabajo los que no lo encuentran en ningún otro lugar, y que son capaces de habitar el frío y tener aptitud para la inmensidad. No aptitud para alardear con la inmensidad ni para intentar reproducir su extensión y su inefabilidad sino para interiorizarla, un espacio que se reproduzca dentro de la mente.
Costa y cordillera
una pareja siempre tendrá la oportunidad
de huir al hielo a los glaciares al oxígeno
en caso que algo se destemple
luego de 5, 7 o 50 años de matrimonio.
Ahí podrán fugarse y soñar
que son pumas o güiñas o zorros,
o mejor: un hombre y una mujer de hielo
que enfrían todo pensamiento que anulan
la esclavitud de los sentidos
y luego se derriten y son agua
pura que baja hacia el valle.
Las sobras y huellas de oruga del trajín neoliberal
Las sobras y huellas de oruga del trajín neoliberal
Y que alguien trata de vender en un paño
apoyado en un poste a la salida de la estación Retiro
se confunden con la basura que arrincona el viento
en el vértice de la reja de 70 cm. de la plaza.
Nunca he sabido para qué sirven esas rejas
si hasta los perros las saltan con facilidad
ni sé para qué sirve lo que venden
o si lo logran vender.
Partes de radios,
una hebilla sin pasador,
la mitad de un globo terráqueo,
juguetes
sin su control remoto
y mutilados,
cuadernos usados por alumnos anónimos
libretitas de cosas pedidas fiado.
¿Qué piensa el que vende eso?
¿Acaso piensa que lo va a vender?
¿Que dos huellas de oruga se van a cruzar
como las huellas de una bicicleta
con las ruedas mojadas
y que el botón único perdido en el mundo
va a dar por fin con su familia
como en un melodrama japonés infantil?
¿Es una actitud zen de espera
o una forma de entablar una especie
de plan para establecer una conversación,
como me imagino esperan los que venden libros
toda la tarde en una manta
sin que nadie compre?
¿Y qué atuendo va a llevar la chica pobre
en todas las fiestas venideras,
en todos los terremotos venideros?
¿No es eso la historia de la literatura?
¿No es eso la poesía?
¿Intentar vender algo del todo inservible
o tal vez mostrarlo como en un museo?
¿No hay algo de poeta de verdad
en ese desquiciado maloliente
que ofrece fotocopias con poemas
escritos en letra cursiva
a la salida del cinematógrafo,
del que huimos?
¿Por qué siempre, además,
aparecen estos chiflados
a la salida del cinematógrafo?
Ese lugar sagrado por la oscuridad
y el anonimato de la audiencia
¿Por qué a la gente le gustan tanto
esos chiflados: que el divino anti cristo,
que la stella, que rodrigo lira,
que los personajes de bolaño,
que panero, etc? A quienes no les dieron
ni una sopa caliente en vida y ni hablar
de una ayudita terapéutica de índole alguna?
El tremendo esfuerzo que hay que hacer
para ser normal, Germán, escúchame bien che,
¿Sabés que es heroico ser normal, no?
Nítido de palabra y de mirada, no?
En Bs As era una anciana que se ponía
a la salida del Centro Cultural San Martín.
Nunca hay poemas realmente sorprendentes
en esa gente. Los he leído. Por ahí alguna imagen.
En tanto, el Estado, la prensa y algunos comerciantes
insisten en las ventas fomento impactos cifras
rankings ratings. Quizás ahí están las dos imágenes
lejanas y precisas de las que habla Godard,
puede que me equivoque:
1) unos burócratas, comerciantes y operadores
que hablan de fomento a la lectura, ventas
y hasta de bestsellers sobre-modulando y de traje
y 2) estos vagabundos y majaretas que leen
agendas ajenas del año pasado.
El sujeto del carrito manicero p ej compró
una libreta de anotaciones de abarrotes y precios:
y eso lee.
Bueno, en ese caso tuvo éxito el que recogió
esa libreta de la basura: pudo venderla. Y la libretita
encontró un lector. Y el lector descifró
como los que pescan en un lago y esperan pacientes
toda la noche bajo la luna y hablan en monosílabos
o como los que instalan una editorial
en un país no ilustrado en el culo del mundo
cuya población no alcanza a cubrir sus necesidades básicas.
Como los que piensan que la reutilización o el reciclaje
son una realidad posible, puede ser
pero las grades industrias contaminan ríos, glaciares
y hacen desaparecer especies y montañas en un día.
O como quienes creen que alguien que perdió
un repuesto, un enchufe, una pata de muñeca
o la pieza de un tocadiscos del todo descontinuado
encontrará al remoto objeto que la desea, a la máquina
que existe en alguna parte y que no funciona
por la falta de ese enchufe, esa piecita, esa aguja específica,
esa pierna de muñeca que se dispersó
por el mundo o el país como en un juego
de mecano y exilio o quiebre amoroso
¿Podrá ese enchufe hembra discontinuo
encontrar a su macho discontinuo
y mandarse una gozosa enchufada
con chispas que provoquen un corto circuito
debido a la ansiedad del encuentro amoroso
desperdiciado por dos personas que se aman?
Más fácil sería comprar
aún más ítems nuevos hechos en oriente
a los que no les falte ninguna pieza
–pero les faltará, tarde o temprano–
para llenar el mundo. O Comprar
perfumes o cosas falsificadas
que venden dos sujetos que se dieron el trabajo
de elaborar un discurso elocuente
y vestirse de traje y corbata
¿Venderán alguna cosa falsificada
para poder por lo menos almorzar por ejemplo?
Me senté en un boliche en Retiro
y escuche varias conversaciones.
Hasta hubo uno que decía
muy serena y racionalmente
que mucho mejor era delinquir
Al menos, Azúa y Carreño venden libros:
a veces toman el paños con rapidez de pumas
y arrancan de Carabineros por las galerías de San Diego.
Versos e imágenes encontradas en el mercado persa
Usar metraje ajeno
y con eso hacer un poema
Tomar historias ajenas
no como el viejo del saco o la bruja
roban niños y recuerdos
Pequeñas resurrecciones
de la historia y la imagen
Las metáforas son siempre las mismas
según algunos. No lo sé:
se supone que los ríos son el tiempo
pero podrían ser la posibilidad de fuga
desde un pueblo asfixiante
hacia mar abierto:
los ríos son una autopista de agua
así como las venas
son autopistas de sangre
por eso ella lava la ropa y su cuerpo
para una travesía larga con su amado.
Flor de altura
¿Sabías que existen los K.O. de pie
sin que el tipo caiga a la lona, T.K.O.?
Los fantasmas dan le pelea.
Do not go gentle
en la noche que atrapa:
Es trampa, it’s evil. Recuerda
la serena resistencia
de la flor de altura,
roca y frío.
Aquí luces sonriente con otros jóvenes.
Payasean luego de hacer una cumbre,
hacen esgrima con bastones de trekking
y muestran sus torsos en pleno frío.
Se arrojan una bola de nieve como bola de baseball
que uno de ellos batea con un bastón.
La escasa flor de altura no había aparecido
desde las grietas y el hielo
solo para que recobraras fuerzas
y llegaras a la cumbre, aunque así lo creas
y está bien que así sea:
hay que creer
como la gente que filmó y fotografió
los momentos felices de sus vidas.
BAUTIZO Y CONSTRUCCIÓN
Las presencias que aparecen en el metraje
que encontramos en el mercado persa
no tienen nombre ni localidad:
hay que otorgárselos
y ponerlos en circulación ya bautizados
Escojamos el nombre entonces
para la novia que arroja el ramo
y para la chica que salta y lo recoge
aunque pareciera que lo alza triunfal
cual un trofeo o testigo en una posta
—una amazona en strapless pelo dorado
hombro y espalda descubiertos—
materiales para construir un mundo
a soberana pinta propia
pero con el 70 % del trabajo hecho
por muertos y fantasmas:
estas filmaciones ajenas
son nuestros hijos adoptivos
Contamos con los modelos para construir
una civilización o una ficción. Algo así
como esos micro-mundos de la infancia
en donde uno era dios por un instante.
Chasqui
El sol ilumina los senderos
pero tras una alfombra roja
de gala, retirada y rayo verde
el sol nos abandona
y hay un lapso de oscuridad
–cuaresma y recogimiento–
antes de que comience a asomar
la luna tras la montaña: una madre
con una enorme linterna mágica.
El sol y la luna nos dejan ese lapso
para que tomemos conciencia
de nuestro eventual desamparo,
para que no perdamos el instinto,
para aprender a sobrevivir
para chequear el cuerpo
revisar víveres, agua, comida.
Los que se sientan bien
y los más audaces y equipados
pueden avanzar algo en las tinieblas;
los demás –si es breve el lapso–
se detendrán a esperar y ordenarse
tras alguna roca o árbol
sin que el cuerpo se enfríe.
Peligro y belleza en el delivery de versos
en zonas de acantilados y barrancos.
El poeta es un chasqui.
Se viene el temporal
Las jurásicas hojas del gomero
se preparan para un baño;
las gotas les resbalan sexis
como a Ronda Rousey en el tatami
Esas hojas te hacen sentir diminuta
cuando caminas por el patio.
Se vienen Godzilla al parecer
“y ojalá haga mierda todo”, piensas.
La tersura de las hojas del gomero
va a distribuir el riego a las plantas
que cobija como a hijos. Se viene
un temporal, nieve, apagones.
En un país de sismos y fascismos
el inconsciente de la gente se prepara.
p ej cogen velas con la excusa
de ofrendarlas al altar donde conviven
Buddha, Ganesh, Rita de Casia
junto a varias divinidades prehispánicas.
Pero es obvio que esas velas de fervor
son para los cortes inminentes
a los que nos acostumbró la dictadura
y la condición de jalea del país.
Vivir sobre jalea
es una lección de sabiduría
sobre la impermanencia de las cosas.
Las nubes son gitanas morenas
a punto de empezar el zapateo.
Gritan queltehues
con alarma de poetas alharacos
y vuelan a la ciudad con zalagarda:
Se viene nieve y temporal
¡ay de quien anda de paso en todo sitio!
¡ay de aquel del que no tiene patria!*
*¡ay de aquel sel que no tiene parka!
(final en la versión poemas de séptimo básico )
La única performance de mi vida
La única performance de mi vida
ha sido poner cera con tierra de color roja
en el piso de un cuarto que convertí
en estudio monacal.
El contraste del blanco
de la cal de las paredes
y el rojo del piso
fueron mi obra maestra.
Aplico cera en cuatro patas
y me siento como una esclava
El piso lucirá impecable
como para la visita de la Virgen.
Es como si hubiese asesinado a alguien
y esparciera la evidencia de la sangre
o me regocijara en su plasticidad
¿A quién habré asesinado hoy?
Quizás maté a alguien y no me di cuenta
como cuando uno abre el periódico
y tiene que leer alguna barbaridad
o escuchar algo horrendo. He aprendido
a evitar estridencias y accidentes
y a no provocarlos ¿Es sangre lo del piso?
Esas sordideces gustan mucho
a nuestras católicas y retorcidas cabezas
Uno siempre mata a alguien
y todos los días lo matan a uno
y se pierde mucho tiempo al pedo
en resucitar.
Germán Carrasco (Santiago, 1971) Ha escrito La insidia del sol sobre las cosas, Calas, Clavados, Multicancha, Ruda, Mantra de remos y la recopilación de columnas y crónicas periodísticas A mano alzada. Premio Pablo Neruda, Diario de Poesía (Bs As).