Poemas de Lilia Parisí
Hola animal
te quiero
He visto como llegaste a mí
a través del olfato
Y yo te olí también antes de tocar la fortaleza
que convierte mi casa en bosque
He reconocido entre los ojos tu degüello
y llego a tu encuentro también para lamerte
atender tu chillido
tu destello
tu primera noche acá en la Tierra
Yo
necesito que alguien cuide
el tenor y la calidad de mi alimento
que quite con cuidado el nylon que cubre mi cabeza
y limpie los conductos por los que respiraba
inicialmente
Necesito que alguien
apoye su mano en mi diafragma
para ver si este sigue el curso de todo lo existente
Contracción-expansión
Me contraigo más de lo que indican
las sanas ecuaciones del mundo
me comprimo en los asientos de un tren donde no duermo
pero simulo vida
Voy y vengo
como si afuera de la cápsula
hubiera algo
un sonido
una máquina de oxígeno
Hola animal
te quiero.
Ese día me había peinado mi padre / Como si fuera un hombre / dispuesto a subir a un caballo / yo / Él / como una cabra / Maté a alguien / me dijo / Con las mismas manos de peinar / Pensé / Y yo de ahí todo / Y yo de ahí / los cismas / los barrancos / Sin aire / Y por las mañanas / sin peinado / Y los niños perdidos / de ese entonces / que venían / Los niños / sangrantes / de esos días /que venían a jugar / ponían la locura / junto al dulce de la tarde / Junto al cuchillo / Y al humus negro / de donde regresan / sus manos / Cada vez / que mi padre / me peina.
Necesito encontrar
a los niños
que nacieron el día que
nos conocimos
Quiero saber
si han desarrollado
una patología
un trastorno
Si el oxígeno doméstico con el que se atragantan
los debilita
o les trae el alimento
Si alguno tiene el pie llagado
o plano
Si traen el pecho partido de antemano
o nace entero
Quiero saber si alguno de ellos tiene
rostro
Si llevan por nombre
una invocación al nuestro
o a la muerte
Quiero saber dónde están los niños
que nacieron el día que nos conocimos
Si duermen boca arriba
desvalidos
Si fueron escupidos de alguna constelación inmediata
o sólo se batallaron entre el barro
y los cuencos infectos de las plazas.
Habrá que cuidar de los jardines
y todo aquello que en su agonía fue creciendo.
Quiero ser
un organismo unicelular
un sistema elemental y solitario
la parte no escindida de los mares
destruir toda memoria de ríos y vertientes
Nada hay que agradecer a los desbordes marinos
son
las primeras digresiones del vacío
Quiero reaparecer en un punto
volver contra la siega de los cuerpos
Háblenme del Todo / quiero oírlos
Hoy por ejemplo me cuesta atravesar la materia
me encuentro con objetos invencibles
Vuelvo al vicio del orden de las cosas
y quisiera tragarte presencia
o iluminarte con las luces del quirófano
donde fui prometida al nombre
que hoy me lleva.
Marzo
Marzo / que es un lunes extenso nos desabriga de todo / Hay una página del Apocalipsis escrita también en este lapso / donde las muertes lentas e infecciones se vuelven hechos concluyentes / En el mes tres fui amputada / primero de manos / luego de garganta.
Un río seca para siempre en estos tiempos y algunas estrellas se extinguen / precisamente en el punto más urgente de su viaje / Las escuelas / Las primeras hojas de los libros contables / Una cartilla médica se inicia en marzo / Y de nuevo la tierra / Que toma la decisión del recomienzo / nos concede uno a uno la posibilidad del error en cada ciclo / Y los árboles / Los árboles emprenden en sentido contrario un curso de renacimiento que nadie garantiza / Se arrugan y obedecen a la muerte / que es en definitiva nuestra madre.
Una mujer/
llamada Alicia/
se dice mi madre/
Fija/
mi nombre/
en un padrón/
de enfermería/
Me sostiene/
Me amamanta/
Me asfixia con el oxígeno claro/
del origen/
Y su cuerpo/
Su cuerpo huele a infier
no/
Su cuerpo huele/
a oficina de correo/
A tinta/
Su/
cuerpo/
huele/
al pescado de las calles/
que nada tiene que ver con las mareas/
Del mío sobresalen los ardores de la luz/
y las costillas/
Y no sé para cuál de las dos/
es/
hoy/
la muerte.
Lilia Parisí (San Juan, Argentina, 1978) poeta y socióloga. Pasó los primeros años de la infancia en el exilio. Produjo y presentó su obra como artista visual entre 2006 y 2012. Fue poeta invitada por el Ministerio de Cultura de Cusco, para participar de “Enero en la palabra, Festival de poesía del sur andino” (Enero, 2018). Cursa la Maestría en Estudios Literarios Latinoamericanos en la UNTREF. Forma parte de la antología de poetas mujeres, que saldrá en mayo de este año, La sangre en las fiestas cortas. Recientemente terminó Primera Guerra, su primer poemario que será publicado a mediados de 2018.